Son todos aquellos que por su composición (ricos en proteína y agua), favorecen el crecimiento de microorganismos, y/o la formación de sus toxinas, por lo que representan un riesgo para la salud, como son; carne de res, cerdo, pollo, ternera, pescados y mariscos, etc., huevo, leche y sus derivados, salchichería y embutidos.
Algunos tipos de frutas y verduras, como los melones rebanados, tomates rebanados, y los brotes de alfalfa o de soya, son también alimentos potencialmente peligrosos. Por lo que es muy importante mantener la temperatura de su refrigerador a 40°F (4° C) o menos. La temperatura del congelador debe ser 0° F (-18° C). Verifique periódicamente las temperaturas.