Carlos Joaquín

Gobernador del Estado de Quintana Roo

Mis Origenes

Mis raíces están en la isla de Cozumel, ahí viví mi infancia al lado de mi madre Delmy González y de mi padre Nassim Joaquín, comerciante, pionero del turismo en el estado.
 
Tuve la oportunidad de estudiar la licenciatura de Contador Público con una especialidad en Finanzas, y después hice un diplomado, lo que me permitió prepararme para trabajar y dar resultados.
 
Me casé con Gabriela Rejón, con quien tengo tres hijos: Ana Gaby, Carlos y Miguel. Mi familia, mi mayor orgullo, es el impulso para salir adelante y hacer bien las cosas.

Mi trayectoria

Para llevar soluciones a las personas y tengan oportunidades para mejorar su calidad de vida, es necesaria la experiencia.

Trabajé en empresas privadas en donde aprendí que se debe cuidar cada peso para lograr un objetivo.

Como presidente municipal de Solidaridad, logré más servicios dignos en un municipio que crecía aceleradamente, sin tener que endeudarnos. Mi mayor satisfacción es que, junto con la gente, logramos que Solidaridad estuviera de pie tan sólo 4 días después de que nos golpeó el huracán “Wilma”. Obtuve un reconocimiento de la Organización de las Naciones Unidas al haber enfrentado eficientemente el desastre provocado por el paso de los huracanes Wilma y Emily, ambos de categoría 5, y haber impulsado en tiempo récord, la reactivación de la industria hotelera.

Como diputado federal, logramos aumentar el presupuesto destinado al turismo que genera miles y miles de empleos en todo el país.

Cuando fui Subsecretario de Turismo del Gobierno Federal, contribuí a que se rompieran récords de la actividad turística y fomenté el turismo social, porque todos tenemos derecho a disfrutar nuestras riquezas.

El 05 de junio de 2016 fui electo Gobernador del Estado de Quintana Roo, tarea con la que he logrado sacar adelante nuestro Estado de las crisis más severas que se han enfrentado: sargazo, huracanes y Covid-19. Acciones con las que con esfuerzo y trabajo dedicado hemos protegido no solo la consolidación turística de la entidad, sino el bienestar y la vida de los quintanarroenses.

En la atención al arribo de sargazo, contribuí a que México sea un ejemplo mundial al convertirse en el único país que está atendiendo el fenómeno como política pública y problema de Estado. Fungí como convocante de las naciones del Caribe para coordinarse y buscar una solución al recale del alga que afecta a varios países de la región.


Como resultado de mis acciones y gestión, Quintana Roo es punta de lanza de la “nueva normalidad” en México, sentando las bases para que el turismo sea decretado como actividad esencial y estratégica, una demanda planteada desde hace años por gobiernos de varios estados a la federación.