Tener una casa propia es poder cumplir el anhelo de contar con un lugar en el cual nos podamos sentir seguros, cómodos, felices y esperanzados, para ir construyendo día a día, en armonía, los mejores momentos con los cuales decorar la vida.
Para alcanzar este sueño es que trabajamos de manera ardua. Nos esforzamos en todo momento por conservar una fuente de empleo digna, en la que se garantice el acceso a todos nuestros derechos sociales.
En muchas ocasiones conseguirlo lleva años, o décadas de sacrificios. Por eso cuando al fin se cuenta con el crédito hipotecario, o mejor aún, con las escrituras liberadas, se siente la satisfacción del deber cumplido. La alegría de que ahora sí, podemos tener certeza jurídica sobre un patrimonio, que más allá de pertenecer a una persona, es propiedad de una familia, que ya no vivirá el sobresalto de tener un hogar a donde llegar al final del día.
Con esta idea, el gobernador Carlos Joaquín entregó hoy mil 200 préstamos personales, y créditos hipotecarios del FOVISSSTE, a trabajadores y pensionados del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) de Quintana Roo, acompañado por el director general del ISSSTE José Reyes Baeza Terrazas.
Ante los trabajadores beneficiados con estas acciones dijo que resulta gratificante entregar créditos de vivienda y escrituras, haciéndose realidad el deseo que por muchos años tuvieron estas familias.
Hizo un llamado para multiplicar esfuerzos, a fin de que podemos abatir el déficit de vivienda en nuestro estado, tanto en la zona urbana como en la rural, para disminuir la desigualdad.
Chetumal, Quintana Roo