Elvira Poot Martín, tiene de manera urgente dos situaciones que resolver en su familia: la alimentación y la salud. El problema que afronta es que hasta el momento no ha logrado encontrar una forma adecuada y permanente que le permita hacer frente a estas dos necesidades básicas.
Pero con quien sí puede contar es con el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia de Quintana Roo, que le ha apoyado con la entrega de despensas y medicamentos. De esta manera Elvira puede estar más tranquila, a sabiendas que hay una institución pública dispuesta para apoyarla.
Casi en las mismas circunstancias están Clotilde Balam May y Fidelia Chávez Hau, ambas son personas de la tercera edad, y por lo tanto su situación se agrava, ya que cada vez son menos las oportunidades que en el sector privado se les quieren otorgar.
A ellas el Sistema Estatal DIF les entrega una ayuda económica, despensas y pasajes. Para que puedan hacer frente a su condición de desigualdad, y tengan más y mejores oportunidades de bienestar.
Al igual que estas tres mujeres, cerca de 150 personas, de los grupos sociales más vulnerables acuden a las instalaciones del DIF estatal, principalmente de la región sur del estado y de otros municipios, en busca de despensas, pasajes, medicamentos, prótesis, estudios médicos, gastos escolares y funerarios.
La instrucción de la señora Gaby Rejón de Joaquín, presidenta del DIF estatal, es que a través del área de Desamparados, se puedan brindar más y mejores oportunidades para que los quintanarroenses en condiciones de mayor vulnerabilidad mejoren su calidad de vida.
Chetumal, Quintana Roo